10 febrero, 2009

Cambio de Casa: El Jardín de Karuna


Han sido muchos buenos momentos los pasados en esta Isla, sobre todo siempre bien acompañada por todos vosotros. Pero la casa se estaba quedando pequeña, así que he decidido mudarme. Cambio una Isla por un Jardín. Espero os guste.

31 enero, 2009

Los Tudor



Casualmente la descubrí por internet hará unas semanas, y no pude evitarlo, me llamó tanto la atención que acabé comprándome la primera temporada por probar, y la misma la he acabado de un tirón. Ha sido visto y no visto. Y es que debo confesarlo, habiéndose estrenado en España a finales del 2007 (canal +, de pago), habiendo estado nominada a varios Emmy, yo descubro su existencia ahora. Pero no he perdido el tiempo, pronto continuaré con la segunda, pues la serie engancha desde un comienzo , ya sólo por la estética y puesta en escena de algunos actores. 

Ya de primeras, bien es verdad, llama la atención el aspecto en la serie de Enrique VIII , desde luego no es acorde con la verdadera imagen que debía tener este monarca. Es más, aparece como si tuviera una edad similar a la de Ana Bolena, cuando en realidad debieron llevarse mínimo 10 años de diferencia (él más que ella).

Está claro que la serie no es acorde al 100% con la historia que nos ha llegado a nuestros días. Pero salvo algunas salvedades que he leído por ahí, sabe alentar a la curiosidad del espectador para que investigue por otros medios sobre lo que cuenta. En mi caso por ejemplo, me ha hecho descubrir cosas que hasta ahora no sabía, como la existencia de lectura prohibida que llegó a manos de Enrique VIII, escrita por mano del hereje Tyndale, y que vino a darle coraje para su enfrentamiento posterior con el Papa y la iglesia.

Hay sucesos históricos bastante relevantes que la serie no los ignora, como la llegada de la 'enfermedad sudorosa' a la corte inglesa, la existencia del cardenal Wolsey y su impronta sobre las decisiones de Enrique VIII, las conspiraciones que tornan en derredor del rey (como ocurría en toda corte)... Si bien es cierto que hay otros detalles que caben hacer mención, y que es importante que no se engañe el espectador creyéndose todo lo que vea, como la princesa y hermana de Enrique VIII, Margarita. Ésta, es una combinación de las dos hermanas que tuvo en realidad, María de Tudor y Margarita (quizás para evitar confusión con la también llamada María, hija de Catalina de Aragón). 

Un elemento clave de esta afamada serie, quizás sea la atrayente y cuidada estética ya no solo en el físico de los personajes, sino también en el vestuario y ambientación de la época. Aunque un poco engañosa, pues la depilación reflejada en extremo debió brillar por su ausencia en aquel siglo, entre otras cosas. No obstante, la altivez y esplendor de una reina como Catalina de Aragón ha sabido plasmarse muy bien, como también la actitud descarada que debió tener Ana Bolena, y la extrema vanidad del rey, que no llevaba nada bien se le llevara la contraria.

Gracias a esta serie he descubierto a actores que me han parecido sobresalientes, como nuestra reina, hija de los Reyes Católicos, Catalina de Aragón, encarnada por la actriz Maria Doyle Kennedy; o bien el consejero del rey Thomas More, cuyo personaje lo interpreta en realidad  Jeremy Northam. También un personaje que me encanta es la reina Margarita hermana del rey, cuya actriz fue Grabielle Anwar.

Hay hechos que acontecen de forma muy cercana en el tiempo, cuando en verdad debió distar entre ellos unos cuantos años. Hay finales de personajes que tampoco fueron así, como el que se verá proponen para el cardenal Wolsey. Salvo libertades varias que han tenido a la hora de narrar la historia, pienso que es una serie que merece tenerla en cuenta, eso sí, acompañándose de una lectura paralela de lo que verdaderamente fue. 


02 enero, 2009

Un día para el recuerdo (I)

Sira, nerviosa como era, iba a conocer por primera vez a su suegra. Aparentemente un hecho nada remarcable, salvo por la mera faceta de Katia de ser quisquillosa en extremo, y acompañándose ,casualmente, la torpeza innata de Sira. Tal combinación de por sí tenía que ser la mar de explosiva, en eso andaban las divagaciones de la joven, cuando llegó mucho antes de lo esperado a casa de la familia de su novio. Las preguntas que se hacía eran muchas, las esperanzas puestas bien pocas. ¿La aceptarían? ¿Sabría encajar sin cometer ninguna de sus típicas imprudencias? Estos pensamientos no se los había contado ni a sus más cercanas amigas, pues sabía que no tardarían ni un segundo en reírse de ella, considerándola una boba sin remedio.

Llegó a la puerta color ocre, bien definida de antemano por su chico, sabedor del despiste natural de la joven. Nada mas llamar le abrió la puerta Richard, así que de entrada sintió que todo acabaría según lo deseado. Previas presentaciones y saludos, se disponían a coger sitio en la mesa. Sira convino en ayudar al papá de Richard a poner la mesa y demás, mala decisión por su parte y buena carta de presentación, portaba la sopera y al querer dejarla en la mesa, todo su contenido volcó, para su espanto, en el regazo de katia. Ésta, quisquillosa como era, consiguió callar el alarido que apunto estuvo de salir de su boca, pues la sopa andaba bien caliente. No obstante, no pudo evitar un pequeño espasmo incontrolable por el quemazón que sentía, justo en el momento en que Richard se acercaba a socorrerla. Como éste, a la par, no pudo evitar mirar inquisitivamente a su chica, no se percató a tiempo del manotazo por parte de su madre que iba a recibir, claro está, sin quererse ni venir a cuenta. Pero Richard, dada la confusión del momento y la alegría empañada por lo que había ocurrido, pensó que su madre le había castigado por traer a 'esa chica tan ordinaria' (él sabía que ella así la definiría en ciernes). 

El amor de Richard por Sira sumado al malentendido, hizo gritar a su madre y llamarla multitud de epítetos incalificables e indeseados. Claro está, su padre salió en defensa de su mujer, y se vió forzado a echar de casa, dadas las circunstancias, a su hijo y a su sorprendente pareja. Entretanto, Sira se sentía obligada a solventar aquel entuerto, de tal forma que ni corta ni perezosa y sin pensarlo dos veces, cogió el pequeño regalo que llevaba en el bolso para Tomás, el padre.

Aunque el regalo se encontraba sin envolver, pues no había tenido tiempo, sabía que en un momento dado (ella no pensó que aquel no era el momento ideal), tenía intención de dárselo a Tomás. Conociendo por medio de Richard, la gran afición de su padre por las armas de colección, le había regalado una pistola alemana Walther, sabiendo que era su próxima y deseada adquisición. No pensó en la situación del momento, en medio de aquel caos incontrolable sacó la pistola con el cañón apuntando a Tomás. La reacción de éste no se hizo esperar, siendo un tanto inverosímil, imagino que para no desentonar en este cuadro de sucesos increíbles. 

En verdad este día quedaría recordado por toda la familia durante el resto de sus días. La cadena de sucesos no frenaba su marcha. El padre, al sentirse incomprendidamente amenazado por la joven, levantó el cuchillo jamonero que se encontraba en la mesa, apuntando en dirección a Sira. 

Y es que, para más inri y facilitar la increíble respuesta ante tal situación... los vecinos de encima de aquella casa cuya entrada era una puerta color ocre... habían sufrido un robo acompañado de violencia hacía un par de semanas. El entuerto acabó con dos heridos y los maleantes consiguieron escapar, éstos todavía estaban en busca y captura pues eran peligrosos. Y quizás por ello tenga algo de justificación, si cabe, la respuesta del pobre señor Tomás. Quien, creyéndose defensor de su amenazada familia, y sin soltar en ningún momento el largo y afilado cuchillo, consiguió marcar el teléfono de la Policía. Ésta venía en camino, hasta tal punto había llegado la situación que Richard se encontraba incapacitado para emitir cualquier sonido, Sira temblaba como nunca lo había hecho, eso sí, del puro nervio que contenía agarraba con tal fuerza el arma que bien parecía lo que no era. Kira, entre tanto, y sin poder esperar a que llegara la policía, había conseguido escabullirse para avisar a la vecina de al lado. Se trataba de Rosa, la alcahueta del vecindario, y la única que esos días vacacionales y a esa hora se encontraba en su casa. La pobre mujer, cuando Kira le contó lo que más pudo, y viendo que salía Sira (con el arma todavía asida a su mano)... 




31 diciembre, 2008

Crepúsculo


Catalogada como 'lectura juvenil', la saga de Stephenie Meyer está arrasando en el mercado español. Bien es cierto que pueda haberse visto influido por varios motivos, aparte del ambiente festivo de estas fechas tan proclives en comprar y regalar, bien es cierto que hace nada se ha estrenado en españa 'Crepúsculo', basada en la primera parte de esta serie con el mismo título.

Aunque no es el tipo de lectura que acostumbro, y motivada especialmente por la fama que traía consigo, me leí por curiosidad esta novela, y debo de decir que no me desencantó. 

De ágil lectura, podría catalogarse como una historia de amor. Lo insólito quizás, el tratarse entre una humana y un vampiro o ser inmortal. Quizás es tan sólo esto lo que podría alegar para recomendar su lectura, eso y que se pasa un rato entretenido. 

Lo que más me gustó es que fácilmente invita a imaginarse el amor que pueden sentir los protagonistas, el deseo de ver y saber del otro, se deja ver un cortejo lento e intenso, un cariño incondicional y egoísta quizás, capaz de enfrentarse a las barreras del peligro mortal antes que sucumbir a la angustia de perder de vista lo que se añora. El personaje de la chica, Bella, considero que está muy bien profundizado, puedes hacerte una idea fácilmente de sus debilidades humanas, sus carencias afectivas e incluso se la coge cariño.

Y como ya se sabe, normalmente es mejor leer el libro antes que la película, y así hice. Cual fue mi sorpresa que el film es casi fiel al desarrollo del texto, con unos protagonistas bien escogidas (debo decir que en los primeros minutos pensé lo contrario). Lo malo quizás en la película, es que la acción de la historia acontece muy rápido, y no para tanto en los personajes como para hacerse con ellos. Por ello, Bella aparece como una persona más independiente que en el libro...

Recomiendo la lectura de este libro, y aunque el film no está mal, otra vez ganan las letras :-)

17 noviembre, 2008

Un presente perdido


"Agentes de la Policía Nacional han detenido a tres porteros de una discoteca ubicada en el Paseo de Pintor Rosales por la muerte de un joven de 18 años ocurrida esta madrugada en las inmediaciones del local. Al parecer, los arrestados golpearon a la víctima, que falleció por una contusión o afección miocardíaca"

Hoy en día hay conceptos que van quedando en desuso por la falta de práctica, tanto, que pienso que de aquí a un tiempo formen parte de lo utópico. 

La responsabilidad. Exactamente ¿cómo podría definirse? Ya lo decía  Yeats, ésta nace de los sueños. Pero en verdad ¿es así? 

Adolf Eichmann fue un nazi al que se le concedió la autoría de la exterminación masiva de judíos durante la segunda guerra mundial. Exactamente, su máxima responsabilidad era en el tema de  la logística o transporte de los deportados a campos de exterminio. Tan vívido sintió su cometido, que incluso justo después del fin de la guerra, siguió dando órdenes para el asesinato masivo de judíos.  Para Eichmann lo importante era cumplir con las estadísticas impuestas, a cualquier precio, y lo demostró hasta el final. Pero si él declaraba que sus actos eran consecuencia del cumplimiento de órdenes, y de su responsabilidad en su cumplimiento, ¿por qué acabó huyendo a la Argentina cuando llego el final, en vez de dar la cara? 

Igual que el padre que se impone la tarea de que su hijo sea un hombre de provecho, y con pocos escrúpulos acomete su responsabilidad paterna mediante castigos severos que bien podrían provocar un grave e irreversible daño al pequeño en un futuro. Igual que nuestros máximos responsables en la seguridad pública, que bien consiguen apresar no sin poco esfuerzo un día a un sanguinario criminal, y al cabo de unos pocos años ya está suelto y listo para su próxima víctima.

Por ocurrírseme podría haber infinidad de casos. Son muy frecuentes las ocasiones en que el sentido del deber vela nuestro juicio para a veces llegar a conclusiones inesperadas e indeseadas. Y es que el ser humano es frágil en extremo, estamos rodeados de una fina membrana delimitadora entre cordura e inconsciencia, entre racional e ininteligible. La posible solución quizás radique en buscar la causa, el detonante que hace saltar nuestros resortes de seguridad y que aniquila muchas veces nuestra propia confianza. 

Somos humanos, y por ello somos especialmente frágiles ante un mundo mal construido. Debemos salvaguardarnos de posibles afrentas que nos depare el destino, ¿pero cómo? ¿es posible? Quizás aquí jugara un papel importante la filosofía, tan discutida últimamente la validez de su existencia, así como discutida la de tantas disciplinas por considerárselas 'innecesarias'. Y si en verdad la capacidad de raciocinio es lo que nos diferencia en gran medida para con los animales, no hay que olvidarse de cultivarla, pues ya se sabe, presente recibido y no aprovechado, casi seguro es perdido.


09 noviembre, 2008

'El rojo de las flores', de Anita Amirrezvani



Os recomiendo lean este libro, para mi realmente ha sido una revelación. Ya no sólo la historia en si es novedosa, considerando que el contexto en el que acontece es en la antigua Persia del Siglo XVII, sino también porque es una historia fresca, dolorosa en algunos momentos, pero a la vez enriquecedora, que narra de forma conmovedora cómo una joven cambia el rumbo predestinado de su vida, para conseguir hacer lo que realmente quiere. 

Como comento, en sus páginas se descubre la vida de una joven persa que queda huérfana pronto, hecho que ya de por sí añade más miseria a la mujer en este recóndito lugar del planeta (no ya tanto por la época que hablamos, como se está viendo en la actualidad) La joven y su madre tendrán que hospedarse para conseguir sobrevivir en casa de un familiar lejano y desconocido hasta entonces, y ésto, unido a la gran maña de la niña en el arte de tejer alfombras, permitirán que el rumbo de la vida de ambas cambie de forma insospechada, y muy positivamente para ellas aún a pesar de ser mujeres.

Me ha gustado mucho el libro puesto que ya no solo está narrado de forma que engancha desde el comienzo, sino porque paralelamente a la historia, se cuentan más cosas, se descubren peculiaridades del mundo antiguo persa, conceptos sociales y hechos inimaginables en nuestro mundo (y paredes) modernas. 

Ya nada más verlo entre los estantes de la librería, llama la atención su título, quizás porque no viene a decir nada del contenido que encierra, y a la vez dice mucho. Pero no sólo eso, la autora no menciona apenas (en toda la trama), el nombre de la protagonista, el por qué viene a ser  explicado en la última línea del libro, un detalle y muy simbólico por cierto.

El libro cuenta, pero a la vez enseña y alecciona, demostrándonos que el camino correcto y único viable en la vida de una persona, es sobre todo luchar por lo que quieres, por tus aspiraciones, y más aún por lo que importa, tus sueños.




Yoísmo y nada más


Algo inevitable para muchas personas es hacerse notar, quizás una de las peores desgracias que pudieran sufrir en sus preciadas carnes sería el sentirse ignorados, inadvertidos. Bien mirado y a simple vista, no parece que sea más que un simple vicio en la personalidad, pero profesar 'in extremis' el  inefable yoísmo, bien es cierto, que ha provocada a lo largo de nuestra historia múltiples e irreversibles trastornos. ¿O no es así? 

Como del estado de sorpresa no acabo saliendo nunca en este mundo en que vivimos (por ello soy consciente que en la vejez tendré bien marcadas mis futuras arrugas frontales), he intentado aficionarme al yoga o similar deporte que consiga llevarme a un estado relajado, algo que todavía no he conseguido. Y así, otro absurdo nace noticia. Por lo visto unos jóvenes (en lo único que considero me asemejo a ellos), cuya ocurrencia fue hacerse oir haciendo algo tan absurdo como quemar unas fotos de los reyes de España, se han hecho eco otra vez. Con multa o sin ella, absueltos o no, yo lo tengo claro. Es otro ejemplo de yoísmo mal encauzado, innecesario y dañino. Ellos y otros que los secunden,  pensarán que son revolucionarios, héroes, pero ¿de qué? No son mas que unos ruines, villanos y además ignorantes. 

Ésto queda muy bien explicado en un artículo del Heraldo de Aragón de este viernes, escrito por el catedrático de la complutense,Lorenzo Martín-Retortillo. 'Quemar al enemigo', algo que desde siempre se ha hecho, como bien se hizo en su día con Miguel Servet. Y es que, si estos jóvenes no fueran ignorantes, bien sabrían que ya hace casi 70 años, el pueblo se hizo oir cívicamente, y por urnas decidió que no quería una Monarquía. Por lo tanto, un cambio en nuestra estructura política y demás puede lograrse, luchando claro está, pero siempre, por favor, por vías que se fundamenten en el respeto al prójimo. El fin no justifica los medios.

Algo parecido, siempre por el afán de hacerse oir y demostrar ser el poseedor de la verdad, ocurrió durante la Guerra Civil Española. No es un secreto a voces que fue una guerra entre vecinos en muchas ocasiones. El odio y rencillas latentes entre la población, hacían acto de presencia y se valían de la excusa de la guerra, para liquidar a 'su enemigo'. Un ejemplo clásico es el asesinato del poeta Federico García Lorca, que curiosamente era afín al Frente Popular, y paralelamente tenía amigos nacionalistas. 

Dejemos que hable la razón, pues la cabeza no ha de servir tan sólo de adorno, y comprobado está que el no uso de un órgano puede llegar a atrofiarlo. Podremos tener ideas revolucionarias, pensamientos que creamos nuestra verdad, pero no hay que olvidar que verdad no hay sólo una, sino tantas como personas. Y lo plausible e inteligente, sería ser capaces todos juntos de conseguir UNA VERDAD COMÚN, medios hay, ganas de conseguirlo, esa quizás ya sea otra historia.

P.D.: Actualmente se habla mucho de la 'memoria histórica', pero el término no está bien expresado en realidad. La memoria es algo individual y subjetivo, pero nunca se puede decir que es 'colectiva' o 'histórica'. La memoria es un concepto que lleva intrínseco el matiz 'histórico -a'.



05 agosto, 2008

El mal de la megalomanía

Un tema que está en boga es el de la 'clonación', indudablemente. Tal palabra todos lo sabemos, alude a crear un ser vivo a partir de otro ya desarrollado, de forma asexual (tan solo utilizando  los avances de la ciencia).

Al hombre siempre le ha gustado jugar a 'ser dios', el dueño y señor de todo lo comprensible, está claro que tal preferencia ha traído cosas buenas, pues mediante la ciencia la vida en el siglo XXI posee muchas mejoras que acomodan nuestras vidas. Pero como todo, si hablamos de pros debemos comentar los contra. ¿La ética se aborda siempre a la hora de clonar seres vivos? ¿Deberían considerarse los preceptos morales, prejuicios sociales, como elementos limitadores para que la clonación se de?

Hoy el tema salía a la palestra, ahora se hacen 'imitaciones' comerciales. Una empresa privada en Corea del Sur ha permitido que una señora (tras pagar una ingente cantidad de dinero) pudiera clonar de su mascota querida varias crias! Aquí yo me hago una pregunta clave, se 'clona' el cuerpo(genética), ¿se calca también el alma? Yo lo veo así, todos somos únicos, es imposible e incomprensible que otro ser vivo tenga la misma personalidad, idéntica en todo detalle a otro igual.  ¿Cuál podría ser el fin permisible, éticamente hablando, de la clonación? 

En mi opinión, el hombre no debió atreverse a hacer de creador, es una actividad que no le compete y antinatural. Considero que con esta práctica se ha traspaso el límite, otra vez más y sólo el hombre, como no, el autor confeso. En este caso en el campo de la ciencia.

Todo debe tener su delgada línea, esa que si se traspasa equivale a una falta irreversible, por la vida en este caso y su misticismo innato, y es que con la ovejita Dolly perdimos todo respeto, principalmente, a nosotros mismos.

31 julio, 2008

La inigualable Greta

Hará un tiempo llevo aficionándome a visionar películas 'clásicas', esto cuando el preciado y escaso tiempo libre me lo permite. Si bien al principio, como profana en la materia comencé a ver todo tipo de películas catalogadas como antiguas, en blanco y negro, ya bañadas en color tras pasado un tiempo de su proyección... comencé en seguida a decantarme especialmente por unas en concreto. ¿Cuáles? Debo confesarlo, ella me ha cautivado, la fuerza de su mirada, así como su glacial rostro y ademanes. La 'Greta', conocida también como 'la divina' o 'la mujer que no ríe', ha conseguido todavía tenga más afición por este mi nuevo hobbie, y es una pena que (por lo que leí sobre ella) hubiera dejado de trabajar como actriz tan pronto, justo cuando estaba en la cúspide de su fama, a los 36 años.
Supo como nadie crear un halo de misticismo y unicidad a su derredor, y esto lo reflejó en todas sus películas. Poseedora de un carácter frio, amante quizás de la soledad y alejándose voluntariamente de la fama que la persiguió hasta sus últimos días, no pudo evitar ser blanco de continuos rumores hacia su persona, sobre todo de índole sexual.

Quizás ambigua en sus gustos amatorios, quizás demasiado reservada, o bien tan solo una fachada, la verdad es que fue una pena se marchara tan pronto del cine, y nos abandonara ella así como su arrolladora presencia.
Ella solía decir 'quiero estar sola', pero nosotros no supimos dejarla.

30 julio, 2008

La impronta de la ignorancia

La transformación de mi ciudad en estos últimos años, ha sufrido un cambio espectacular. Podría hablarse de una modernidad novel a los ojos de mis vecinos, unas riberas si no impecables al menos presentables, un aire diferente. Ahora bien, también podría hablarse si es esa la intención, del porqué de la dejadez en el pasado, el descuido evitable y despreocupado en el que se mantenía nuestro río, que viene a ser una impronta clave de Zaragoza, así como otras tantas mejoras en las infraestructuras (accesos a la ciudad, salidas de la misma que pedían a gritos hace ya tiempo fueran atendidas)... Y yo me pregunto, ¿será que ganar un proyecto como la EXPO ha despertado el ingenio de los que están al mando?

El tránsito del antes y el después, tiene como pareja de baile los atascos en el tráfico rodado, así como los atascos mentales, inevitables e impertinentes, de muchos de mis paisanos, que aturdidos por el ruido nocturno del evento vecino claman al cielo sin ser oídos. Si bien es cierto que para la economía de nuestra ciudad pueda ser positivo, pues supondría entrada de dinero mayor a la acostumbrada, tiendo a pensar que no es para tanto, pues no nos habían comentado que tal entrada conllevaría necesariamente una salida de dinero previa de los ciudadanos, pues subir ha subido todo.

Así que, si ya hemos sufrido (y seguimos sufriendo), obras numerosas por toda la ciudad, que conllevan un fastidio generalizado (teniendo mis serias dudas de que luego acabe el evento vaya a quedar algo de positivo). Si nos han taladrado ideas e ideas relacionadas con la macroexposición en nuestras ya torturadas cabezas (cada uno con sus particulares motivos), si nos han prometido el oro y el moro hasta la saciedad, como resultado de lo que iba a venir... si bien a éstos y más atropellos nos habíamos llegado a acostumbrar, para que mis oídos quedaran indignados al escuchar del alcalde actual de Zaragoza Juan Alberto Belloch (puesto de discutible merecimiento, aunque ésto sería otro discurrir), su exhortación a los ciudadanos maños de que su visita a la muestra se realizara mejor entre semana (pues los fines de semana hay problemas por la cantidad de gente que acude). Ejem... entonces o bien me queda ir en mis vacaciones, si considero debo obedecer a este señor, o pedir permiso en el trabajo para que me dejen ir...
Y digo yo... entre otras cosas... no deberían haber preparado a la EXPO para los casos de masivas visitas, ya considerándose desde sus cimientos como un GRAN ACONTECIMIENTO?? :-/

28 julio, 2008

Crimen y Castigo, de Fiódor Dostoievski



Hará unas semanas que terminé este entrañable libro, espectacular a mi modo de ver por la forma de desarrollar el lado introspectivo del personaje, sus deseos inconfesables y todo proceso mental que pueda seguirle.

¿El fin justifica los medios? Quizás es una de las preguntas que de forma más insidiosa ha transitado por mi cabeza durante su lectura. Si bien tengo claro que no sería justo ni razonable que la respuesta fuera una afirmación, leyendo el tormento 'mental' al que se somete voluntariamente Raskolnikov por encontrar una respuesta adaptable a sus acciones, no he podido evitar sentirme angustiada por el pobre joven.

Personalmente el autor ha conseguido que se le coja cariño a sus protagonistas, de forma que cuando el destino inevitablemente atrapa al verdugo, no pueda evitar sentirse cierto desazón. Lo más increíble quizás de la historia, es cómo incluso cuando llega a pagar por su crimen, Raskolnikov sigue defendiendo su inocencia, basándose en una teoría sorprendente que lo exime de culpa (teoría que no desvelo aquí, pues seguro que quizás haya gente que no lo haya leído pero en ciernes se atreva).

Como pincelada, mucha fuerza desprende su lectura, gran capacidad de abstracción respecto de lo material, para adentrarse (como casi ninguno) en los recovecos del alma humana, tan sencilla a veces y tal complicada y tortuosa otras.

Lo mejor a mi modo de ver, que parece que no tenga solución el alma de Raskolnikov, cuando poco a poco se ve que va recuperándose y retornando al camino de la correción moral, gracias al amor que llega a sentir por Sonya. Un amor 'nuevo' así como sanador.

¿Lo habéis leido? ¿Qué opináis de la teoría de Raskolnikov?

31 mayo, 2008

Camila (I)

Las letras, palabras y frases salían de su mente a borbotones, era uno de aquellos momentos cada vez más escasos, en los que Camila como si de un automata se tratara, sentada medio encorvada (a pesar de que miles de veces le habían aconsejado hiciera lo contrario), provista de lápiz en la mano y sentada frente al retrato familiar de siempre, escribía sobre papel las historias que le acechaban. Eran sus llamados "momentos de trance", absorta en todo lo que la rodeaba, bien podía explotar una bomba en el jardín de su casa que ni se inmutaría.

Camila era una joven soñadora, ya desde niña su madre la había dado por imposible, pues a pesar de ser tranquila e introspectiva, dentro de si fluía un torbellino a punto de explotar en cualquier momento. Y es que a pesar de no haber sido excesivamente mimada se le antojaban cosas la mar de raras. Su madre le había echado en cara ,miles de veces, cuando había rogado hasta quedarse extenuada y casi sin respiración que le compraran un pony. Tal era su cabezonería, que por las noches despertaba a gritos a toda su familia, a tal grado que incluso vecinos de edificios colindantes llegaron a percatarse . Al despertar bien podía creerse que recién salía de un baño de vapor, nerviosa y agitada continuaba con sus quehaceres diarios... Pero su madre jamás retrocedió en su negativa, pues la conocía bien y cuando hoy le apetecía un pony al día siguiente se le antojaba, como así ocurrió, dormir en la caseta de su perro Black.

Camila había nacido con los astros de su parte, bien era sabido en todo el pueblo de sus artes adivinatorias. Muchos vecinos habían llegado a insistirle a la madre para poder interrogar a su hija, y así quizás retomar el rumbo perdido en el que sus vidas caóticas se encontraban. Además, como si tuviera un imán invisible de lo excéntrico, le ocurrian siempre las cosas más disparatadas y peculiares.

Cada año que pasaba y a pesar de su corta edad, le nacía un mechón azul en su joven cabellera. Al principio pensaba que era producto de su imaginación, mil explicaciones había buscado, pero a cada intentiva por demostrarse que era imaginada se autoenseñaba todo lo contrario. Había interrogado sobre tal hecho a toda su familia, intentando encontrar algún antecedente familiar en tan rara peculiaridad, pero nadie pudo ayudarla. Si se arrancaba o cortaba el mechón, aunque fuera de raíz, al día siguiente lo volvía a tener plantado en la cabeza. Bien es cierto que en tan ardua investigación familiar, descubrió unas cuantas cosas la mar de interesantes, como que su tía Julia había nacido con seis dedos en cada mano, o bien que a su tío-abuelo Charles le entusiasmaba visitar de ordinario cementerios, no por nada en concreto, tan solo le gustaba pasearse por ellos sin más.

Camila poseía una tez clara, de rostro triangular y barbilla prominente,  algo descuidada en su apariencia, solía llevar la misma ropa varios días seguidos si no le decía nada su madre. Aun así, no pasaba inadvertida a los ojos de cualquiera. De ojos verdes y muy expresivos, junto con su figura liviana y ademanes delicados, formaba un conjunto armonioso y muy llamativo. A pesar de que se encontraba en edad casadera y pretendientes no le faltaban, nunca había llamado su atención hasta la fecha ningún chico que conociera. Hasta que un día...

Y con esto una pregunta, ¿te quedas con ganas de saber algo más sobre Camila y/o su historia?

26 mayo, 2008

Cada letra a su momento...

Muchas veces los prefacios o introducciones son inadvertidas apenas por el ávido lector, quien prefiere pasar página y comenzar a enterarse de lo imaginado por otros. Pero lo que muchas veces no se sabe, es que en ocasiones el libro puede contar con una entrada nada despreciable, que a veces mejora a la historia misma. Personalmente, éste fue el caso, y así llegué a encontrarme en uno lo que sigue:

"... Solamente hay una manera de leer, que es huronear en bibliotecas y librerías, tomar libros que llamen la atención, leyendo solamente ésos, echándolos a un lado cuando aburren, saltándose las partes pesadas y nunca, absolutamente nunca, leer algo por sentido del deber o porque forme parte de una moda...Recuerde que el libro que le aburre cuando tiene veinte o treinta años, le abrirá perspectivas cuando llegue a los cuarenta o a los cincuenta años... No lea un libro que no sea para usted el momento oportuno...  En todas partes, si mantiene usted despierta la mente, encontrará la verdad en palabras que no han sido escritas. Así que no deje nunca que la palabra escrita se adueñe de usted. "

Cuántas veces me he encontrado con gente que se atreve a opinar de quien no ha leído nunca clásicos, o que bien prefiere lecturas más cómodas y simples (que no por ello menos interesantes), o bien es asiduo lector de autores contemporáneos que están de moda pero no precisamente por un léxico excepcional... Y es que mucha gente practica la lectura tan solo por snobismo, como un elemento más en su vida para mantenerse en parangón con la gente que frecuenta, o bien tan solo por aparentar ser más vivido.

Hay gente que tiene la extraña manía de tener que terminar un libro antes de empezar otro(aunque le aburra soberanamente). Pero ¿por qué hacerlo? 

Y es que hay mucha palabra escrita, el secreto es encontrarse con la adecuada en cada momento.

  Tomé un curso de lectura rápida y fui capaz de leerme 'La guerra y la paz' en veinte        minutos. Creo que decía algo de Rusia
  Woody Allen

El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho.
Miguel de Cervantes Saavedra

Por cierto, adivináis de qué libro es el retazo... ¿? 

20 mayo, 2008

El personaje


"El hombre hace, la mujer es" Robert Graves




- El personaje - En mi opinión, cuando terminas un libro (te haya gustado o no), puede ocurrir dos cosas fundamentales (siempre hablando del caso en que el autor haya conseguido 'transmitir')


O bien sientes que te han contado una historia, bien documentada quizás, relevante o simplemente interesante. O bien más que una historia sientes que el autor/ra se ha sincerado al lector, y camuflada o no en su relato, bien consciente o inconscientemente, te ha contado cosas de su persona, sus inquietudes, pensamientos y sentimientos.


Y así me quedé tras leer 'La grieta', último libro de la recién premiada Doris Lessing (Nobel en Literatura). La historia es sencilla, pero a la vez transcendente, pues versa sobre la tan manida situación de las relaciones de género. Es decir, hombre-mujer, similitudes, diferencias, y hay aquí la gran cuestión, ¿complementarios?

Todo ello, la interminable búsqueda de ésta respuesta viene a intentarse solventar mediante una fábula sencilla y a la par interesante. El marco donde transcurre la historia es la época primitiva, en la que se ingenia un posible comienzo del género humano, mediante una novedosa teoría: la vida humana partió de la existencia de una mujer, y no de un hombre como nos han hecho creer, ¿sería esto posible? (según la introducción del libro, la ciencia recientemente  lo ha indicado como posibilidad factible). 

Van lloviéndose líneas, frases y páginas de 'La grieta',  sobre la vida recién regalada a nuestros 'padres' primitivos, en la que todo es nuevo y espera a ser descubierto, incluso la sexualidad entre grietas (mujeres) y hombres (monstruos/chorros). Ambos sexos no se entienden, pero con el tiempo van descubriéndose que se necesitan, ya no solo como medio para la satisfacción de una necesidad básica como lo es el sexo, sino también para asegurarse la continuidad de su especie, y aún más importante si cabe, disfrutar conjuntamente de sentimientos y recuerdos que van conformándose en su vida en común, y que son los que construyen una vida, una historia personal.

Los hombres son imprevisibles, las mujeres más racionales, a veces un tanto quejumbrosas para ellos, pues prefieren pensar antes que actuar, y esto muchas veces choca con los fines de sus compañeros. Realmente esto sigue ocurriendo en nuestro día a día, si bien es cierto que también nos damos cuenta que nos necesitamos, hay algo más que nos une y nos hace estremecer, el sentido de la pertenencia, de que alguien nos espera en casa allá donde vayamos.
Lo recomiendo de verdad.



05 marzo, 2008

Receso Interrumpido

Como indico en la entrada, ésto ha sido un receso y además involuntario, por temas ajenos no he podido actualizar este pequeño rincón, y desde ya quiero dejar desde aquí un saludo y un abrazo para todo aquel que se ha preocupado por mi ausencia, que espero no tenga que verse más truncada :-) Que ya os echaba de menos ;-)



Pues bien, como siempre y aunque no con la frecuencia que me gustaría, d
urante aquellos minutos, horas y días que han transcurrido, me he visto más que bien acompañada por dos maestras de la ficción y de la palabra escrita. Entre otros he podido disfrutar de la grata lectura de 'El cuaderno dorado' de Doris Lessing, premio nobel de literatura. 


De prosa cautivadora y envolvente, más que una historia individual se puede interpretar como todo un tratado o ensayo sobre la psicología femenina, desarrollado de forma más que perspicaz. Bien también es verdad que la autora es mujer, y como tal un punto a su favor para poder plasmar con tanta exactitud las vicisitudes y pensamientos a veces más que asfixiantes en los que nos vemos inmersas las mujeres. Sobre todo en los años cincuenta, en los que algunas 'formas de vida' de la mujer llamada hoy en día 'independiente' era novedosa, y como tal invitaba a la habladuría de la gente. 

El miedo psicológico que puede llegar a sentirse a la soledad, al paso del tiempo y sus consecuencias, pero siempre desde el punto de vista femenino.  La historia o trama secundaria, una escritora en crisis que sufre de parálisis creativa, problema a sumarse a varios más que vive en una etapa de su vida harto complicada, como la necesidad que siente a veces de encontrar un hombre a su lado, problemas con su amiga y ésta para con su hijo, dificultades al criar sola a su hija... 

Bien podría decirse, o deducirse de su lectura, que en este libro no importa tanto la sinopsis o argumento de la historia, sino de las ideas y pensamientos que se desprenden de su lectura, así como de una mente locuaz, la de la emblemática Doris Lessing.


Otro libro que recién he terminado es 'Soria Moria', de Espido Freire. La lectura es fresca y se hace breve, amena, en la que se deja ver los matrimonios concertados entre familias que se imponían a las niñas de entonces. 

Relación juvenil que se ve truncada no solo por los impedimentos familiares, sino también por la Gran Guerra que se avecina. Amistad de unas niñas que conforme crecen se acompaña de competencia por conseguir el amor del mismo hombre. Secretos de infancia guardados con recelo... Todo ello narrado mediante una lectura ligera aunque cautivadora. No obstante, debo decir muy a mi pesar, que aunque la escritora me encanta, es de mis preferidas, me ha dejado desconcertada un poco con éste último libro, pues pienso que la historia está más que trillada, no se dice nada nuevo y se trata sin mucha introspección. Quizás lo que más he echado de menos es ésto último, pues pienso que Espido Freire tiene capacidad más que suficiente para dejarse llevar por 'los momentos', y narrarlos como nadie, a modo de ensayo.